Hoy es mi cumpleaños y aprovecharé para quejarme un poco y actualizar esto con una breve opinión.
Muchas veces me pregunto el por qué soy una persona tan alejada de la sociedad y su ética superficial y por tanto, soy una persona "rara". Pondré un ejemplo:
Un día, a un chico cualquiera le empiezan a interesar las chicas como algo más que lo superfluo. Ese chico no sabe todavía nada de relaciones ni del sexo opuesto, y por verguenza no pregunta al resto de chavales de su edad por miedo a que se rían de su inexperiencia. Pero al chico le da igual, pues ha visto a una chica -que de manera objetiva puede ser como sea, pero desde la subjetividad de los ojos del chico es lo más especial y perfecto- y esta le empieza a interesar.El chico no sabe nada de relaciones ni de cortejos, -sólo la falsedad y la subrealista visión de las relaciones que ofrece el mundo del cine y la tv- entonces decide que la mejor manera de atraer a esa chica es siendo una persona transparente y no escondiendo detalles ni manías o vendiéndole una persona que realmente no es. Por supuesto, tratar con amabilidad a esa chica era esencial para ese chico.
Tras meses de roce con esta chica, parece que la chica está encantada con el chico y este lo nota, y decide dar el paso, pero la realidad es muy distinta y cruel...
La chica no está interesada en el chico y le ofrece amistad únicamente la cuál el chico acepta tras la desilusión con cierto interés. El chico entiende que no quiera nada más pues es imposible gustarle a todo el mundo. El chico entiende que la chica esté buscando algo diferente a lo que el chico es. Lo que el chico no comprende que la chica se arrastre detrás de alguien que la trata como un simple objeto y ésta no sólo lo permite, sino que cuanto más sufre, más ciega está....
La moraleja de todo esto en mi opinión personal es una simple pregunta:
¿Merece la pena en serio pasarlo mal por alguien así?
Si algún día os da por haceros esta pregunta, si os sirve de consuelo, hay mujeres que no son así, aunque yo todavía no he visto muchas...
domingo, 21 de noviembre de 2010
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No todos son así, eso es cierto. Otra cosa diré y es que a veces el amor es ciego. El amor es tan ciego que te lleva a hacer cosas que jamás uno pensó hacer. Parece mentira pero es real.
ResponderEliminarUn saludo